• Reintentar la prueba después de X días.

Los estudios demuestran que tener un tiempo de espera entre varios intentos ayuda a los estudiantes a retener mejor la información.

  • Decidir si se debe aprobar un examen antes de avanzar.
  • No permitir avanzar hasta que hayan pasado un tiempo mínimo en el cronómetro. Ideal para fines regulatorios.